LA REPOBLACIÓN DEL VALLE DE AYORA-COFRENTES. Por Víctor Manuel Galán Tendero.

                El valle de Ayora y Cofrentes concentró una importante población morisca a finales del siglo XVI. Bien organizada desde tiempos de la Baja Edad Media, se resistió a la expulsión decretada en 1609. La expulsión resultó contundente en las tierras del valle, como se desprende de la relación de sus casas de 1602 a 1646:

                Aunque el recuento de 1602 no parece muy seguro, la caída tras la expulsión morisca es contundente en Cofrentes. Jalance tenía una importancia pareja a Cofrentes en los últimos tiempos de los moriscos, con una repoblación más tardía. Jarafuel, con otra destacada población morisca, se puso por delante en la llegada de repobladores, muchos procedentes de la villa de Ayora. La población morisca de Teresa era todavía mayor a inicios del siglo XVII, con una repoblación más posterior, una vez que otras áreas ya se encontraban ocupadas. Finalmente, constatamos que Zarza tuvo una evolución más acompasada que los otros núcleos.

                La llegada de las nuevas gentes trajo nuevas costumbres y usos, pero el recuerdo de los moriscos quedó en la Historia y en la geografía de las tierras de Ayora y Cofrentes.

               Para saber más.

                Eugeni Ciscar, “El valle de Cofrentes a principios del siglo XVII”, Saitabi, 45, Universidad de Valencia, 1995, pp. 125-134.