LA SANTA FAZ, LA FORTALEZA DE LA HUERTA DE ALICANTE.

15.04.2015 23:19

 

                En 1557 la monarquía de Felipe II estaba empeñada en una cruenta guerra en el Mediterráneo con el imperio otomano y sus dependencias en el Norte de África. Los conflictos europeos habían gastado muchas energías y el reino de Valencia se consideró desprotegido ante la amenaza turca.

                Para mejorar sus defensas el virrey ordenó una visita de inspección, cuyas recomendaciones de mejora para las tierras del término municipal de Alicante se consignaron en Játiva el 8 de octubre de 1557.

                El monasterio de la Verónica, donde se veneraba la imagen de la Santa Faz, se consideró fundamental al estar emplazado en la huerta alicantina, tan feraz como abierta al peligro llegado por mar.

                Se propuso bajar la cubierta del dormitorio de las monjas clarisas para resaltar la torre aledaña. Asimismo se recomendó alzar una nueva torre.

                En cada torre tenía que haber cabida para veinte hombres. Se concebía la torre como una batería capaz de frenar un avance enemigo, dando tiempo al despliegue de la hueste municipal para coparlo.

                En consonancia, las tapias del monasterio debían ganar en altura y mejorarse la provisión de armas de fuego, al menos con dos mosquetes más en un tiempo en que los alicantinos todavía empleaban la ballesta.

                El monasterio sería el fuerte castillo de la huerta gracias a estas obras. De hecho en el de Santa Bárbara en la cima del monte Benacantil también se instó a resaltar la torre de l´esperó y al alzado de la muralla en la peña misma.

                Nos encontramos, pues, ante una construcción religiosa a modo de fortaleza de Dios que insertaba elementos como las torres de la huerta, convirtiéndose en un castillo no roquedo, con puntos de contacto con el templo exento de San Salvador de Muchamiel.

                Pero ya se sabe que el hombre propone y Dios dispone. La mejora defensiva del monasterio no fue precisamente coser y cantar.

                Fuente: Archivo Municipal de Alicante. Armario 1 (legados 1 a 22) y Armario 5 (legajos 16 y 17).