LOS INQUIETOS UNIVERSITARIOS DE LA VALENCIA DE 1611.
La vida de los estudiantes universitarios siempre ha sido agitada, según corresponde a la edad juvenil. Algunas ciudades alemanes temieron sus desmanes, que las Constituciones o normas del Estudio General de Valencia de 1611 procuraron evitar.
Se prohibió ir a las comedias los días de estudio y lección bajo pena de un día de prisión y el pago de seis reales castellanos. En caso que se reiterara la falta más allá de cuatro días se incurriría en la expulsión definitiva, además de las sanciones apuntadas.
La honestidad y la composición en el vestir fue muy deseada por las autoridades académicas. Se impusieron las medias negras, pardas o moradas. Tampoco se permitieron las cintas ni las bandas de colores en el calzado.
La violencia tampoco resultaba permisible en personas que se preparaban para ejercer oficios de responsabilidad y se prohibió la tenencia de armas, no sólo entre los estudiantes, aunque a veces se podía hacer alguna excepción por motivos de defensa estricta.
Para evitar problemas y algazaras se vedó que dentro del Estudio los estudiantes y los profesores, a veces no tan distanciados entre sí, no dispusieran ningún altar en la festividad de San Lucas (18 de octubre), Nuestra Señora de la Sapiencia (17 de diciembre) u otras.
Un jurado de la ciudad de Valencia y el rector del Estudio deberían de estar atentos al cumplimiento de unas normas que demuestran que a veces el pasado no ha sido el paraíso de la educación perdido.
Fuente: Constitucions del Estudi General de València. Fetes en onze de maig, any mil siscents y onze. Edición facsímil de París-Valencia, 1980, pp. 48-49.