SOBRESALTO EN EL CAMINO DE ALICANTE A MADRID. Por Víctor Manuel Galán Tendero.

05.10.2019 20:32

                En el siglo XVII, el comercio entre Valencia y Castilla se hizo cada vez más importante, lo que dio pie a más de un incidente, como el sucedido en octubre de 1683, denunciado por el virrey de Valencia, el conde de Cifuentes, al presidente del Consejo de Aragón don Pedro Antonio de Aragón.

                De la ciudad de Alicante habían partido hacia Madrid unos hombres de negocios y carreteros: Bautista Frías, Vicente Moxica y Juan Maruenda, cuando unos vecinos de Yecla a una legua de la localidad los apalearon por razones que no se dicen en la documentación.

                A la vuelta de Madrid, los maltratados alicantinos encontraron a dos de sus agresores y se vengaron maltratándolos.

                Las nuevas del incidente llegaron a Alicante, con la consiguiente conmoción de todos los que emprendían el camino a Madrid. El gobernador del partido alicantino Francisco Guerau y Siurana se previno y quiso castigar a los delincuentes.

                Se temía que la noticia encendiera una cadena de represalias a ambos lados de la raya entre Valencia y Castilla, pues los naturales de sus localidades eran duchos en tomar las armas, lo que perjudicaría seriamente el comercio y las rentas reales a distintos niveles.

                Para aminorar la inseguridad de los caminos, se entabló contacto con el Consejo de Castilla, que a su vez lo notificó al corregidor de Chinchilla, del que dependía la villa de Yecla. La cooperación entre las jurisdicciones de aquella España era tan laboriosa como necesaria para atajar situaciones embarazosas.

                Fuentes.

                ARCHIVO DE LA CORONA DE ARAGÓN.

                Consejo de Aragón, Legajos 0581, 042.